Toronto recibe a legión de deportistas rosarinos

Cuarenta deportistas rosarinos y de la región dirán presente en los Juegos Panamericanos, a los que llegan con objetivos distintos pero con un denominador común: la ilusión de disfrutarlos.

Algunos competirán solos. Otros en grupo. Algunos llegan en su mejor momento. Otros hubiesen querido estar mejor preparados. Algunos debutan. Otros tienen la tranquilidad de la experiencia. Algunos van con el podio entre ceja y ceja. Otros encontrarán su premio si alcanzan el mejor rendimiento, aunque eso no implique una medalla. Algunos tendrán la presión de buscar una plaza olímpica, otros ya se la aseguraron o deberán pelearla en otro horizonte.

Estos son y así están los 40 deportistas rosarinos y de la región que dirán presente en los Juegos Panamericanos de Toronto, cuya inauguración oficial será este viernes pero que ya comenzaron con un deporte que se puso en marcha: el waterpolo, que hoy verá el debut de las chicas y los chicos argentinos.

Se sabe que Rosario es la Cuna de la Bandera. Y también de grandes deportistas. Hace poco, cuando se inauguró el Paseo de los Olímpicos, un homenaje emplazado sobre avenida Pellegrini y en el cual se da cuenta de todos los atletas que participaron de la máxima cita mundial del deporte, uno de los miembros del Comité Olímpico Argentino dijo que la ciudad se lo merecía, ya que históricamente fue de las que más atletas aportó a esos Juegos. Incluso, la colocó en el segundo lugar de la consideración. Y con los Juegos Panamericanos no hay excepción. Cuarenta rosarinos en la delegación argentina, algo así como el 10% de la misma. Eso sin contar otros nueve que viajarán como entrenadores o miembros de cuerpos técnicos.
Si de poner nombres propios al asunto se trata, quizás sean los chicos de la gimnasia y del squash los que se ubiquen bien arriba a la hora de las posibilidades de podio. Promete mucho lo que pueda hacer Nicolás Córdoba en barra fija, está en un momento excepcional. El atleta nacido en Alvarez se ubica primero a nivel mundial en su especialidad y viene marcando presencia fuerte en las copas del mundo. En el equipo, además, estará nada menos que Federico Molinari. El gimnasta nacido en Rosario y criado en San Jorge tiene confianza ciega en sus condiciones después de haber sido finalista olímpico en Londres 2012 y va por todo en las anillas. Ambos también competirán en la modalidad de equipos.
Robertino Pezzota se jugó todo lo que tuvo al alcance de la mano en el último tiempo. Solo y con su hermano Rodrigo buscarán darle una nueva medalla al squash. Robertino es hoy por hoy la mejor raqueta argentina y todo lo que hizo en los meses que pasaron fue pura y exclusivamente pensando en estos Juegos, incluso logrando triunfos frente a jugadores top del circuito internacional. Fernanda Rocha tampoco se descuidará y, si bien sabe que es difícil, siente que tiene con qué colgarse una medalla tras una preparación de altísimo nivel a la que no le faltó nada.
El casildense Federico Grabich dio la nota en el último Sudamericano de natación en Mar Del Plata colgándose 10 medallas y aspira a plasmar lo máximo posible de aquello (no olvidar que en Toronto estarán los nadadores estadounidenses) para subirse al podio. Y más de una vez.
El remo es el deporte que más oros supo darle a la delegación nacional. En la última edición de Guadalajara 2011 también lo demostró (5). Y en este sentido, María Clara Rohner no puede menos que entusiasmarse cuando se suba al bote con su compañera Milka Kraljev.
Salvo catástrofe extraordinaria, Emiliano Boffelli con Los Pumas Seven (rugby) y Manuel Brunet con Los Leones (hockey) estarán arriba del podio. Integran equipos de deportes en los que Argentina es claro dominador continental.
El resto tiene quizás un camino mucho más complejo para subirse al podio. O realidades que, saben, no alcanzan para tal objetivo. Pero en algo no difieren: todos, en igual medida, llevan la ilusión a flor de piel. Los Juegos Panamericanos, el eslabón intermedio entre los Odesur y los Juegos Olímpicos, son una vara indispensable, una cita que nadie se quiere perder en el año previo a Río. Acá convergen los mejores del continente. Y así están los exponentes de Rosario y la región.

Las Aguilas argentinas quieren posarse sobre una definición
Si de candidatos se trata, Nicolás Córdoba, el "Colo" de Alvarez, se lleva buena parte de las luces. Después de un año de logros muy buenos en el ámbito internacional intentará "llevarse una medallita" para su vitrina. La barra fija es su gran aliada, a pesar de que intentará hacer una buena labor en el all around y contribuir con el resto del equipo argentino, Las Aguilas. " Como siempre digo, las expectativas son dejar a Argentina bien parada, venimos desde chicos compitiendo con la celeste y blanca. Me encantaría dejar a la bandera albiceleste lo más alto que se pueda", se sinceró Córdoba, quien afronta sus segundo Juegos. Otro con chaces de lucirse es Federico Molinari, en anillas, en sus cuartos y quizás últimos Panamericanos: "Si estoy bien puedo pelear medalla, es mi gran objetivo. Y se la dedicaría a mi mujer y a mi hijo, que van a estar acompañándome". El rosarino Juan Carlos Pinto viajó como entrenador.

“Mis mejores premios serán la experiencia y los vínculos”
Alejandro Tosti prefiere no hablar de un posible resultado en Toronto, sino que menciona a los Juegos Panamericanos como un “proceso” en su carrera. “Mis mejores premios serán sumar experiencia y los vínculos que voy a tener allá, conociendo a muchos atletas argentinos que compiten a alta intensidad”, manifestó el golfista de 19 años. “Jugaré a un gran nivel frente a profesionales”, destacó a su vez el número uno del ránking nacional de aficionados. El jugador rosarino surgido en el club Mitre de Pérez sostuvo que se encuentra “muy bien después de cuatro semanas jugando en Europa. La preparación entre torneo y torneo fue muy buena”. Tosti, que tendrá su primera experiencia en Juegos Panamericanos, señaló que “la etapa previa fue un poco difícil” debido a que estuvo “un mes en el hospital a causa de una encefalitis”.

Con Los Leones, a marcar el territorio
Con Manuel Brunet como uno de los estandartes del equipo, Los Leones llegan a Canadá con la confianza en alza. Son los actuales campeones continentales. Se consagraron hace cuatro años en Guadalajara 2011, arrebatándoles justamente la medalla dorada a quienes hoy son locales.
El seleccionado está viviendo un momento excepcional, ya instalado desde hace un año en la elite del hockey internacional a partir de la medalla de bronce que consiguió en el Mundial 2014, y cuyos méritos ratificó recientemente al haberse asegurado la clasificación olímpica en Buenos Aires, a partir de las semifinales de la Liga Mundial. De no mediar inconvenientes en la fase regular y de cuartos de final, Los Leones deberían verse las caras nuevamente con Canadá en la definición continental.
Brunet, hombre clave en el esquema del DT Carlos Retegui, disputará así sus segundos Panamericanos.

En busca de una nueva medalla
El wakeboard es sinónimo de Alejo De Palma. El rosarino es el indiscutible número uno nacional de este deporte y cuenta con una larga y rica trayectoria. Hace cuatro años, en los Juegos Panamericanos de Guadalajara 2011, De Palma alcanzó la medalla de bronce. En esa ocasión finalizó en la cuarta ubicación, pero subió un puesto porque quien había terminado segundo dio dóping positivo. Con 31 años, tiene las cualidades y la experiencia necesaria para ir ahora por otro podio. El rosarino conquistó la plaza para los Juegos Panamericanos en febrero pasado, cuando finalizó en la séptima posición en el campeonato Panamericano que se desarrolló en el lago Giloema, ubicado en Canning, provincia de Buenos Aires. Mientras que el año anterior, De Palma participó en los Juegos Odesur de Santiago de Chile y obtuvo la medalla de bronce. Ahora, espera como mínimo que ese sea el color de presea en la ciudad canadiense de Toronto.

“Será otra experiencia inolvidable”
En febrero pasado, Belén Potassa declaró que quería volver a la selección femenina, como ocurrió con Carlos Tevez en la masculina. Y a la goleadora con pasado en Rosario Central, actualmente en UAI Urquiza, se le cumplió el deseo. “Los Juegos Panamericanos significan muchas cosas. Por empezar una nueva convocatoria a la selección. Además, quizás sean mis últimos Juegos, ya que no se si volveré a estar dentro de cuatro años. Será otra experiencia inolvidable”, dijo. La jugadora nacida en Cañada Rosquín hace 26 años estuvo en los Panamericanos de Río de Janeiro 2007 y Guadalajara 2011, y en ambos no pudo pasar de ronda. Por tal razón, es mesurada sobre las chances del seleccionado. “Las expectativas son ganar el primer partido. Eso nos ayudaría mucho en lo anímico”. Y, aunque es complejo, la expectativa “es una medalla”. Potassa contó que entrenaron en cancha sintética, que es la superficie que se usará en Toronto.

“Lograr la plaza por equipos para Río”
Para el rosarino Bruno Passaro “significa mucho” esta oportunidad de competir en sus primeros Juegos Panamericanos. “Es un sueño poder competir en este nivel con los mejores del continente y representar al país. Espero aprovechar esta experiencia al máximo”, declaró el jinete de 26 años. “El principal objetivo será lograr la plaza por equipos para los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro y tratar de que Argentina quede en lo más alto”, declaró el rosarino, quien sabe que una medalla individual será un logro muy difícil, aunque “trabajo para eso”. El jinete, que competirá en la prueba de salto, reseñó que junto a los demás integrantes del seleccionado argentino cumplió “una gira previa por Wellington (Estados Unidos) que fue muy positiva”. Y agregó que desde hace varios días se instalaron “en Toronto para competir y alcanzar el mejor nivel” para cuando les toque debutar.

“Nunca pensé llegar a esto”
El año pasado, en Rosario, Daniel Canelli se clasificó a los Panamericanos de Toronto, algo impensado en su corta trayectoria. “Cuando me inicié en el tiro con arco, hace 7 años, nunca pensé llegar a esto. Por lo tanto, los Panamericanos significan el mayor logro, algo que obtuve en base a largas horas de entrenamiento y sacrificio, que mi familia debió soportar”, declaró el deportista de Timbúes, de 48 años. Si bien manifestó que “las expectativas son muchas”, mantiene los pies sobre la tierra porque estará “ante los mejores tiradores, varios de los cuales son campeones mundiales y medallistas olímpicos”. Canelli dijo que “el mejor premio sería que el equipo argentino consiga plazas para participar de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016”. Y contó que desde el 19 de junio iniciaron una gira por Mérida (México) y luego concentraron en el Centro de Alto Rendimiento (Easton), en Salt Lake City (Estados Unidos).

Debutante joven y con condiciones
Juan Pablo Savarino tiene 19 años y aguarda su primera participación en los Juegos Panamericanos. El rosarino competirá en 25 metros tiro rápido. Con la ilusión de llegar a los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016, el año pasado sorprendió en los Juegos Odesur de Santiago de Chile con la medalla de plata. El mejor antecedente fue el 11º puesto en la Copa del Mundo de Fort Benning (Estados Unidos), realizada este año, frente a campeones mundiales y olímpicos. Savarino es un joven que demostró condiciones en una disciplina en la que sobresalen los experimentados. Desde su entorno informaron que el joven viajará a Toronto el viernes para sumarse al resto de la delegación argentina. El rosarino será el primer tirador de la ciudad en los Juegos Panamericanos desde Héctor Fossati en Río de Janeiro 2007.  Antes, Leopoldo Fossati, padre de Héctor, estuvo en Caracas 1983.

“No fue fácil llegar hasta acá”
Las pesas atraviesan un momento de recambio, no exento de cuestionamientos, y en medio de todo eso el rosarino Iván Palacios estará por primera vez en los Juegos Panamericanos. “Los Panamericanos son uno de los acontecimientos más importantes que voy a tener. No fue fácil llegar hasta acá. Pero con esfuerzo y sacrificio se consiguió”, dijo el pesista de 19 años. “Apunto principalmente a mejorar mi marca.  Me ilusiono con una medalla, le daría un salto de calidad a mi carrera”, agregó el único representante argentino masculino en esta disciplina. Hijo del entrenador de pesas Hugo Palacios, y con una hermana que se quedó a las puertas de los Panamericano, Joana, el joven sostuvo que “el mejor premio es representar a la Argentina”. Palacios manifestó que el cambio de entrenador del seleccionado nacional y la designación del búlgaro Konstantin Darov “ayudó muchísimo porque trabaja a conciencia con cada atleta”.

Todo por llenar el podio de arena
Hace algunos meses, cuando todavía jugaba al vóley de sala, Nicolás Capogrosso ni se hubiese imaginado que iba a jugar los Panamericanos. Pero el destino lo llevó rapidísimo a su primera cita continental, a los 20 años. Junto al marplatense Ian Mehamed buscarán dar el batacazo y colgarse una medalla. Aunque en la arena: "Somos conscientes de lo difícil que es, pero vamos a dejar todo por eso. Para mí ya es un premio estar en los Panamericanos, son un sueño enorme y mucho el esfuerzo que hay detrás de él", resumió el rosarino de 2,02 metros, quien se inició deportivamente en el Club Sonder. Sobre la preparación, detalló Nicolás que "fueron seis meses de competencias, entrenamientos, giras por EE.UU., etapas del circuito nacional, sudamericano y mundial que nos permitieron llegar muy bien. La última parte fue muy dura, de muchos nervios, ansiedad, altos y bajos, pero fue una gran previa".

Para pelearles a las potencias también habrá brazadas locales
Las pruebas de pileta serán seguramente uno de los grandes atractivos de los Panamericanos, ya que con la presencia de los nadadores yanquis, canadienses y brasileños, el nivel se elevará al máximo. Pero con Federico Grabich, el tiburón de Casilda en el agua, Argentina tiene con qué pelear. "No me interesa repetir marcas, sino mejorar y si Dios quiere poder subir a un podio, pero muchos nadadores la van a poner difícil. Hace cuatro años, cuando lo hice en  Guadalajara, ese fue uno de los mejores momentos de mi carrera, espero que esta vez sea aún mejor".
Aquella vez también participó y logró bronce el rosarino Marcos Barale, en relevos. Hoy Barale volverá a competir. En los 100 metros mariposa, su especialidad, dejará la piel. "Siempre está bárbaro representar a tu país o y más en los Panamericanos, que es un evento con mucha magia. Mi mejor premio sería sumar en el medallero argentino", dijo Barale.
La entrenadora Mónica Gherardi es parte del equipo.

Con objetivos diferentes y chances de medalla
Los rosarinos Martina Isequilla y Ezequiel Di Giácomo, el sanlorencino Facundo Pagiola y el santafesino Rubén Rézola, que compite para Granadero Baigorria, tienen diferentes ambiciones. Isequilla, de 18 años, dijo que estos Juegos “son una gran puerta que se abre” y que se irá satisfecha con el hecho de “haberlo dado todo, más allá del resultado”. Su objetivo es “llegar a la final A”, entre los seis mejores, en K1 500 metros. Para Di Giácomo, que competirá con Rézola en K2 200 metros, “el premio mayor sería la medalla de oro. El mejor recuerdo sería ver a nuestra bandera bien alto”, dijo el palista de 23 años. Pagiola, de 22 años, piensa disfrutarlo, como cada vez que le toca “representar a la Argentina donde sea”, haciendo lo que más le gusta. El desafío será “bajar” su marca personal en C1 1.000 metros.

“Representar una vez más estos colores es un privilegio”
Históricamente el remo fue gran hacedor de medallas en la cosecha nacional de las citas continentales. Con la presión que eso significa, pero también con la sapiencia de la capacidad de sus botes, el equipo argentino intentará mantener  o mejorar el gran rendimiento de Guadalajara 2011 (8 medallas, 5 de oro). Y en la tripulación tendrán a una ya vieja conocida, como la rosarina María Clara Rohner, quien estará en el doble par ligero junto a Milka Kraljev. Hace cuatro años, la deportista de Remeros Alberdi se colgó la de oro en el cuádruple par, en cuyo bote había una coterránea suya, Gabriela Best. A sus terceros Juegos, Clara dice llegar “con la mejor preparación de mi carrera”. Pero no elige un metal para graficar el resultado que busca: “Sería lindo plasmar todo el trabajo hecho en una regata, aunque mi premio ya es compartir el bote con Milka, nos elegimos cada día para la tripulación”. Y cierra, satisfecha: “Estar representando a nuestros colores una vez más es un privilegio y una responsabilidad que elijo abordar en cada jornada de entrenamiento. Es hacer realidad el sueño cada día”.

“Sólo pienso en nadar fuerte y poder dar lo mejor de mí”
Con 23 años, Julia Arino iniciará sus segundos Panamericanos. Pero con una particularidad. En Guadalajara 2011 compitió en la pileta. Esta vez lo hará al aire libre, en aguas abiertas (10 kilómetros), en el Ontario Place West Channel.
“En las aguas abiertas hay muchos factores que influyen a la hora de competir y durante la carrera misma. Así que sólo pienso en nadar fuerte y dar lo mejor de mí. El mejor premio creo que sería estar dentro de las 8 mejores a nivel continental, pero no tengo tan presente eso en mi cabeza”, le contó a Ovación la representante de Náutico, quien siente estar en un lugar de privilegio: “A más de uno le gustaría tener la oportunidad de estar acá. Yo la voy a aprovechar al máximo”.

“Para mí es un orgullo compartir la villa con deportistas de toda América”
Tras hacer su presentación por primera vez en Wimbledon hace muy poquitos días, Facundo Bagnis llegó a Toronto con la confianza de saber que se puede subir a un podio. Ese es el gran sueño: “Tengo muchas ganas de hacer un gran torneo. Argentina, en general, tiene un equipo muy competitivo. Me siento jugando muy bien y mis objetivos son las medallas, si son de oro, mejor”, dijo el tenista nacido en Rosario pero residente en Armstrong.
Bagnis, de 25 años, jugará singles y dobles junto a Guido Andreozzi. Con el porteño ganó justamente la medalla de oro el año pasado en los Odesur. Además, pretende disfrutar a estos, sus primeros Panamericanos, en todo sentido: “Siempre fui fan de todos los deportes, espero aprovechar los Juegos también por ello. Para mí es un orgullo representar a Argentina y compartir la villa y los estadios con deportistas no sólo de mi país, sino de toda América”.

“Hace cuatro años mirábamos la pelea desde la tribuna”
“Hace cuatro años mirábamos la pelea casi desde la tribuna, hoy competimos cabeza a cabeza”. La frase pertenece a Mónica López, entrenadora del equipo argentino de nado. Y refleja lo que pasó en el último tiempo en la disciplina: hubo un crecimiento sostenido. Por eso, a pesar de que se trate de un deporte en el que acortar las distancias entre una nación y otra parezca una quimera, hay ilusión.
“Física y mentalmente estamos muy bien. Hay una lucha muy dura con el primer pelóton de resultados y esperamos estar ahí, con los mejores. Argentina hoy, a diferencia de otros años, está mejor plantada y lista para subir un escalón”, agregó la entrenadora, quien comandará al equipo en los Panamericanos por quinta vez y lo hará junto a Carina Roscoe como asistente e Ignacio Rodríguez como PF.
El conjunto nacional competirá en solo, dueto y equipo, teniendo en las dos primeras especialidades a las hermanas Etel y Sofía Sánchez. Ellas, la mayoría de las nadadoras argentinas, López y ayudantes, son de GER.
A la hora de delimitar el resultado, la entrenadora fue clara: “Argentina va por el quinto puesto y de allí lo que venga mejor será bienvenido. Acá se sube despacio, pero a paso firme. Armamos un equipo respetable, que mete miedo, que mejoró como nunca. Hicimos todo lo que pudimos sin guardarnos nada, para pelear”, se enorgulleció López, ya instalada en la villa panamericana.

Con los antecedentes de medallas de bronce
No se andan con chiquitas. Los hermanos Robertino y Rodrigo Pezzota, y Fernanda Rocha, aspiran a subir al podio. Los dos primeros tienen antecedentes en ese sentido. Robertino ganó la medalla de bronce por equipos en Santo Domingo 2003, junto a Rodrigo, y también en dobles en Guadalajara 2011. “Mi idea es tratar de ganar la medalla de oro en dobles y por equipos. Y en individual la de bronce o plata, ya que el oro es imposible porque juega un colombiano que es 4º del mundo”, dijo Robertino, quien este año conquistó el PSA de Paraguay, su primer título profesional. “Me preparé casi dos años pensando en esto. Hice varias giras por América y Europa”, manifestó a su vez Rodrigo. “Además, con la selección entrenamos con el ex número uno del mundo David Palmer, en Orlando”, agregó Rodrigo, quien dijo: “Sólo el oro puede justificar el esfuerzo que hice”. En tanto, Rocha declaró que “es la tercera vez que voy a los Panamericanos y los espero con muchas expectativas”. Y agregó: “Esta vez voy con otra mentalidad. Llegar a los Juegos ya no me alcanza. Voy a competir en individuales, dobles y por equipo, y quiero ganar una medalla”.

Mejorar las ubicaciones de los Juegos de Guadalajara
Los seleccionados masculino y femenino tienen varios rosarinos, incluidos los entrenadores. Y hoy a la mañana debutarán ellos contra Ecuador y ellas ante México por la fase de grupos. Nahuel Alfonso (44 años), DT de los caballeros, dijo que la meta “es quedar entre los cuatro mejores”. La idea es “tomarse revancha” de los Panamericanos de Guadalajara 2011 en los que quedaron quintos. Del actual plantel, Carabantes y López estuvieron en Guadalajara 2011 y Río de Janeiro 2007, Demarchi en Guadalajara y el mendocino Bulgheroni, que juega para la ciudad, en Santo Domingo 2003. Los acompañarán los rosarinos Gabriel Monguzzi (ayudante) y Diego Luna (jefe de equipo). En tanto, Martino, entrenador de las mujeres, dijo que les “gustaría mejorar la 7ª colocación de Guadalajara 2011”, con Laura Font y Carla Comba como sobrevivientes de aquel plantel. Entrenador también de los varones, en los Panamericanos de Río de Janeiro 2007, dijo que el femenino está en una etapa de cambio, con 6 de las 13 jugadoras del plantel pertenecientes a la categoría Sub 20.

“Espero que terminemos de la mejor manera, con el oro”
“Soy nuevo en esto de Los Pumas seven”, dice el rosarino Emiliano Boffelli, como si le faltase experiencia en el rugby. En los Juegos Panamericanos se juega en un formato en el que él tiene poco rodaje, pero si hay algo que sabe hacer el hombre de Duendes es manejar la guinda con mucho criterio. De hecho, hace poco se convirtió en el jugador con mayor presencia en mundiales juveniles. Ahora, en un nuevo reto, intentará con este seleccionado recuperar la medalla de oro que hace cuatro años le arrebató Canadá. “Creo que estamos muy bien entrenados todos así que espero que terminemos de la mejor manera. Eso, obviamente sería conseguir subir a lo más alto del podio y también finalizar conformes con el rendimiento del equipo”, agrega el rugbier de 20 años, en la antesala de su primera cita panamericana. Sobre el significado de participar de semejante competencia, asegura: “En mi carrera esta es una experiencia única. Ya me adelantaron que los Juegos Panamericanos son sensacionales y tengo que aprovecharlos y disfrutar todo al máximo”.

Fuente: Diario La Capital